La performance es una sensación. La sensación que tiene nuestro usuario si la web responde bien, rápido y de forma fluida… O no. Y esto es independiente del dispositivo, lugar, hora, conexión y web que visita aunque, esos factores, influyen en las expectativas que va a tener.
Por eso, la performance NO es cuánto tarda nuestro sitio en cargar ⏲️. Ni su velocidad 🏎️. Son factores que debemos tener en cuenta, porque influyen en la percepción del usuario, pero no es la forma de entenderla. Es por eso que, hoy en día, hablamos de métricas como el First Paint (y todas sus variantes), Speed Index o el Time To Interactive.
El First Paint es el tiempo que tardamos en mostrar algo al usuario en pantalla. Así le dará la sensación que algo está sucediendo. Existen diferentes tipos. Una sería el First Contentful Paint; el primer pintado con algo de significado. Otro, que le daría información útil al usuario, sería el First Meaningful Paint.
El cómo progresivamente vamos pintando información en la web es vital para que el usuario la perciba como rápida. Por ello, fijarnos sólo cuánto tardamos en realizar el primer pintado puede ser un error. Imaginad que pintamos rápidamente el logo de nuestro sitio pero, en realidad, el último renderizado lo hacemos tras quince segundos. ¿Te parecería eso rápido? Por supuesto que no, de ahí la necesidad de la métrica Speed Index.
El índice de velocidad (Speed Index) es una fórmula que mide cómo de rápido el contenido de una página se muestra. Básicamente, compara la distancia entre el primer pintado y el último, además de penalizar cuando ocurre el First Paint. Es una de las métricas más importantes para entender si nuestra página se siente rápida.
Pero imagina que tienes un Speed Index buenísimo; la página se muestra muy rápido, te da la sensación que va volada y, al intentar hacer scroll o pulsar algún botón… ¡no responde! Esto es, que la página, todavía no es interactiva y tiene una métrica asociada: el Time to Interactive.
Ahora que las páginas tienen, cada vez más, una mayor carga de código Javascript que se ejecuta en el lado del cliente, esta métrica es más importante. Por ejemplo, se ve gravemente afectada por el uso, y abuso, de librerías de terceros de tracking y anuncios ya que se tienen que evaluar mientras la página, en realidad, ya se ha pintado.
Para que te quede más claro, te dejo esta genial viñeta donde puedes entender tanto el Speed Index como el Time To Interactive de tu aplicación, y sus consecuencias:
Para poder observar estas métricas la mejor herramienta que puedes usar actualmente es Lighthouse. Puedes usar la versión que viene integrada en Google Chrome, o la utilidad online Page Speed Insights. De hecho, ambas, dan una puntuación general tras dar a cada métrica un peso determinado.
Ya sabes qué es la performance en estos tiempos, ahora toca entender por qué es importante. Me sorprende, mucho, el poco cariño que se le da al rendimiento en las compañías cuando es, aunque no lo parezca, una de las mayores características que pueden marcar el éxito o fracaso de un proyecto.
Si tu página tiene un mal rendimiento, y por lo tanto ofrece una mala experiencia al usuario, desde hace más de un año Google la penaliza en sus resultados. Por lo tanto, ya sabemos que afecta al SEO. Pero, ¿te has preguntado por qué Google es el mayor abogado sobre rendimiento web? No es casualidad y tiene unos intereses. Te explico 👇.
El rendimiento y los ingresos por publicidad Alphabet, la matriz de Google, facturó en Q2 2019 un total de 32,6 mil millones de dólares sólo en ingresos por publicidad 💰. Además de sus propios productos (como Youtube, Google Maps o Gmail), esta publicidad es servida a través de su red Google Adsense. ¿Y dónde se muestra esta publicidad? En las páginas de todo el mundo.
Cuantas más páginas ve un usuario, más publicidad le impactará y más potenciales clics podrá realizar. Y eso es la mayor lección para entender que, el rendimiento de nuestro sitio, también impacta a los ingresos por publicidad. De ahí, el interés de Google en mejorar, en todo lo posible, que las páginas se sirvan con la mejor experiencia posible.
Pero… ¿Por qué usas Google 🤔? Quizás ya lo hacemos por puro automatismo pero plantéatelo. Quizás pienses: “porque me da los mejores resultados”. ¿Es eso cierto? Imagina que te diese los mejores resultados pero sólo después de tardar 10 segundos en cada búsqueda. ¿Seguirías usándolo? Obviamente, es una suma de factores pero descuidar el rendimiento puede ser algo diferencial a la hora de recordar un sitio.
El top of mind o, en castellano reconocimiento de marca, está ligado normalmente a un término de marketing pero, en internet, el rendimiento juega un papel decisivo. Hay un estudio que indica que la lentitud de una aplicación o una página genera más estrés que una película de miedo 😱 y el mismo que enfrentarse a un problema matemático 🧮. ¿Recordarías una página que te genera ese sentimiento? ¿Volverías? Es posible que le des alguna oportunidad más pero… la paciencia se agota.
Otra razón es la conversión de tu página. Es evidente que, cuanto más ágil se desenvuelva tu página y mejora experiencia ofrezca, el usuario este podrá hacer más cosas y, por lo tanto, generar las conversiones o acciones que ofreces. Normalmente, el caso más evidente, es el de los ecommerce pero, en realidad, cualquier página se puede beneficiar de esto.
De hecho, existen numerosos casos de estudio que apuntan a una correlación directa entre mejores métricas de performance con mejores números, como conversiones, en el negocio.
Resumiendo: SEO, ingresos por publicidad, conversiones, top of mind… y podría seguir, con costes de infraestructura y ética (de ofrecer la mejor experiencia a los usuarios pese a su mala conexión o dispositivo).
Existen un montón de recursos con trucos, ideas y acciones para mejorar el rendimiento de tu sitio. Pero me gustaría que te quedases con algo mucho más importante que una acción. Me gustaría darte una herramienta que nunca falla y que puede ayudarte siempre a proporcionar la mejor experiencia al usuario y que, si te fijas, es el razonamiento común de muchas de las acciones que puedes hacer para mejorarla.
El truco definitivo es poner al usuario en el centro 👉 👱♀️:
Piénsalo. ¿Quién usa tu sitio? ¿Para quién lo estás creando? ¿Quién tiene que disfrutarlo? ¿A quién tienes que convencer? Pon al usuario en el centro en tus decisiones, y tendrás la llave para muchas mejoras que te van a ofrecer un salto cualitativo importante. Hazte las preguntas correctas:
Para eso se necesita que toda la organización esté claramente enfocada en ese objetivo, que exista cultura de ver el rendimiento web como algo de todos. Dicho de otro modo, el rendimiento no es un problema técnico. Puede ser un reto técnico pero, si estás trabajando en una empresa, debe ser parte de sus valores preocuparse por estas métricas y, de esta forma, trabajar en tener unos presupuestos donde todos los departamentos entiendan que, añadir algo, tiene un coste.